En verano, el tomate recién cogido de la planta es auténtico manjar divino. Uno de los platos más sencillos y deliciosos de la gastronomía española es el samorejo, un plato perfecto para los amantes de la cocina camprestre y vegetariana. Se trata de una sopa fría a base de tomate y pan, perfecta para llevarla cualquier excursión y tomar fuerzas para antes o después de la caminata.