Hacer reir no es una tarea fácil y si lo conseguimos es sumamente gratificante, tanto para quine la emite como para quien la recibe. Con muy poco algunos consiguen aportar una gran felicidad. Hace unos días asistí a un espectáculo de esos que te sorprenden, el show del clown alemán Gregor Wollny que pasó por el salón de columnas de la capital riojana.
De una simpática pero loca manera, GREGOR Wollny transforma un metro plegable en animales y objetos cotidianos. Como un payaso en silencio que batalla con esos objetos que tienen voluntad propia y enciende un fuego artificial de ideas desde su deseo efervescente de juego y fantasía sin límites. De esta forma tan sencilla Gregor consigue arrancar una sonrisa con el humor de lo absurdo, de lo sencillo, pero no por ello ineficaz ni infantil. Reirse sin más, con libertad ¡deberíamos tener un payaso en nuestras vidas como terapia semanal!
Su web también es muy original: http://www.gregor-wollny.de
Me ha gustao!!!